A Jorgelina Traut y Diego Sehinkman se sumaron Lucas Romero, consultor de Synopsis, Mauricio Bártoli, periodista y Alejandro Katz, escritor y pensador. El cierre del evento estuvo a cargo del vicepresidente de la Confederación, Marcelo Federici y de los jóvenes cooperativistas.
En la mesa de análisis de las elecciones los participantes se refirieron a las últimas elecciones y a la sorpresiva victoria de Milei liderada por las provincias del interior.
Al respecto, Bártoli dijo que: “habría que ver si ese federalismo con impronta agroindustrial está representado por Milei. No podemos desconocer el país en el que estamos donde hay gente que no puede ya comprar carne. Hay que profundizar este problema y conectar con paciencia. No hay que renunciar a los puentes de consenso”.
Romero, invitado habitual a varios programas de televisión y con mucha actividad en redes, señaló que: “Estamos eligiendo la forma en que vamos a tomar decisiones colectivas. Este proceso electoral ocurre en un contexto de profundo deterioro de la calidad de vida de la gente y de las condiciones económicas en general. Ese contexto ya abarca un periodo muy largo, lo que produjo una crisis en la representación política, que es lo que no está funcionando.”
Ante la intervención de Sehinkman, los invitados aceptaron que el problema es más el cómo que el qué hacer, la complejidad de cómo se tomarán las decisiones con el próximo gobierno.
Romero: “a Milei lo explica el contexto, no su discurso. Su activo es el lugar privilegiado desde el cual habla: la no política. Desde ese lugar neutraliza el qué. La pregunta es si el nuevo sistema político podrá dar las respuestas necesarias. Ahora bien, la política funciona bien con diálogo y consenso, así se obtienen las mejores decisiones”.
“En cuanto al campo, hay cierto consenso en que lo que se necesitan son reglas claras y menos burocracia estatal para poder competir mejor”, afirmó el líder de la consultora Synopsis.
Sehinkman habló sobre el teorema de Baglini que veremos en un crescendo a medida que se acerquen las elecciones de octubre. En noviembre, la oferta política “debería ir en un catch all“.
Con respecto al futuro político, Romero afirmó que “si vamos a dividir el poder debemos recuperar mayor tolerancia”
El cierre de análisis político quedó a cargo del intelectual Alejandro Katz, que compartió algunas reflexiones que aquí resumimos:
“El campo tiene algo especial, como lo tiene la ciudad. ¿Cómo podemos pensarnos de acá en adelante? En la conducta política hay emoción y razón. Para entender el voto hay que indagar en ambas. Las emociones son limitadas, hay alegría, esperanza, tristeza, no tantas más. El voto a Milei es transversal en todo el país y el elemento emocional de ese voto común a gente tan diversa conlleva motivaciones de votantes muy diversos. Aquí la emoción común que lo explica es la ira. Una ira con buenas razones, en tanto en los últimos cincuenta años todos los números económicos y sociales se han deteriorado. Vemos el pasado como mejor que el futuro. Venimos de una serie de fracasos absolutos. Con gobiernos recientes que han ofrecido opciones muy opuestas con fracasos atribuidos a quien gobernó antes. Tampoco se han renovado los elencos ni los discursos, con alternativas probadas que no dieron resultado. Esto explica que la emoción que explica el voto sea tan elemental, porque hay incluso emociones más densas que la pura ira. El enojo activa bien cuando se halla una causa y un responsable. En ese sentido, Milei ha sido exitoso comunicacionalmente. El responsable es la casta y la causa el Estado voraz.”
Asimismo, el intelectual aseveró que “Pero también hay un elemento racional en el voto, y en este caso se presenta con sentidos no explicados, como es el caso de la dolarización, donde se importaría el prestigio de una moneda extranjera en detrimento de una propia que está en decadencia. Es una promesa rápida y sin costo aparente. La pregunta es “¿funcionará esta decisión que se ancla en el enojo y en una respuesta sencilla?” Creo que no. Que las soluciones son complejas y difíciles.”
Por último, aseguró Katz, “Estamos entrando en un momento con aceleración populista de las respuestas. Milei es el populismo de mercado, la contracara exacta del populismo de estado. En el mundo occidental estamos viendo este problema, que tiene que ver con la incapacidad de satisfacer las demandas del capital y de la sociedad, de rentabilidad y bienestar de unos y otros. Esto explica a Bolsonaro, a Vox en España, a Trump y a los chalecos amarillos en Francia. Pensamos que en un momento era posible satisfacer aquellas demandas; hoy está siendo muy difícil, creando problemas globales difíciles de resolver.“
A su vez, destacó el editor: “La respuesta a qué hacemos la da la sociedad. Los actores sociales deben intervenir en la vida pública y que puedan crear riqueza y a la vez que esa riqueza permita vivir mejor a la mayoría. Se trata, como decía Julio Olivera, de desarrollo más que del crecimiento. La sociedad debe actuar para que estado y mercado funcionen como dispositivos que mejoresn la vida.“
En el cierre, Marcelo Federici, vicepresidente de CONINAGRO, agradeció a todos los participantes y sumó a Fabio Zamora, presidente de la Juventud de Coninagro, que contó la experiencia del Congreso joven durante el día anterior.
Para Federici, en resumen: “El cooperativismo se formó en tiempos difíciles. Estamos acostumbrados a ello. Queremos ser el canal de comunicación con los poderes públicos.“
