Alejandra Ciocca, Carlos Cava, Inés Fernández y Federico Laborante.
AMPHI (Asociación Mutual de Profesionales del Hospital Italiano) es un ejemplo de mutualidad exitosa creada sobre los escombros de la crisis del 2001. Dialogamos con sus principales actores -Carlos Cava (gerente, ex ginecólogo y obstetra), Inés Fernández (Jefa administrativa), Federico Laborante (Responsable de área de desarrollo y calidad de asociados) y Alejandra Ciocca (contadora)- acerca de una rica historia construida en tan solo veinte años de existencia.
Por Alejandro Galay
Fotos: Santiago Núñez Bonifacino
MM: ¿Cómo es la historia de la mutual?
CC: Comenzó en 1999, donde un grupo se concentró en la asociación civil que existía en el Hospital Italiano, y que tenía como principio crear algo para ayudar a los profesionales, en general de profesiones liberales y autónomos, y que después de los 65 años se retiraban y no cobraban más nada. Entonces pensamos en la creación de la mutual, y llevamos adelante todo el proceso regular para que el INAES nos aprobara el proyecto. Así fue que en el año 2001 se creó la mutual, manteniendo el fundamento de brindar servicios a los asociados y bajo el principio mutual de la solidaridad.
MM: ¿Dónde fue la primera sede?
CC: Iniciamos en un departamento aquí en Almagro, en la calle Pringles esquina Rawson; en ese inicio estábamos la secretaria y yo nadie más, y nos reuníamos una vez al mes. Y así fuimos constituyendo un grupo mayor.
MM: ¿Con qué servicios empezaron?
CC: Bueno, un par de años después, con la crisis del 2002, tuvimos la idea de ofrecerle al Hospital un autoseguro con el subsidio de mala praxis, porque en ese momento las aseguradoras estaban quebradas. Ese fue el subsidio principal de la mutual, el que despertó mayor inquietud en los médicos. Dio mucho resultado con la incorporación de asociados. Poco a poco, mediante los aportes que conseguimos, fuimos viendo la posibilidad de comprar a la vuelta este edificio de la calle Potosí, que antiguamente era un viejo almacén. Acá hicimos la sede que se inauguró en el año 2005. En ese momento logramos sumar el subsidio de retiro.
IF: El subsidio de retiro se inicia de la derivación de aportes. Era una retención que el Hospital Italiano ya le practicaba a los médicos por otros servicios, y a través de gestión de la mutual se logró que un 2% se donara a la mutual para ser devuelto a los médicos a través de algún servicio. Este subsidio de retiro lo empiezan a recibir a partir de los 65 años y por un plazo de 15 años.
MM: ¿Cómo funciona, en rigor, el servicio de mala praxis, siendo este tan relevante?
CC: Comenzamos con un abogado externo y luego creamos un departamento legal, junto a uno administrativo, uno contable y otro de comunicación. Son cuatro áreas.
MM: ¿Qué otros servicios relevantes ofrecen?
CC: Se fueron sumando otros beneficios como el subsidio por enfermedad prolongada, el de maternidad, invalidez, sepelio, nacimiento, turismo y también damos talleres. Del mismo modo tuvimos dos experiencias, si se quiere, fallidas, aunque de mucho aprendizaje, que fueron los servicios de consultorios externos y el de obras al pozo, muy difíciles de sostener económicamente ambos.
MM: Son variopintos…
FL: Tenemos yoga, tango, mindfulness, estimulación cognitiva, conciencia corporal, memoria, actuación, tai chi. Hay que destacar que al principio se brindaban algunos pocos con un cobro adicional a la cuota social y no tenía mucho éxito, así que tomamos la decisión de incluir más talleres sacando el adicional y dando acceso como parte de la cuota social con un tope de tres actividades. Hoy tenemos casi quinientos asociados (sumando a los adherentes) que vienen a los talleres. Se trata de un público en general de más de 50 años.
IF: Hay uno que viene de un voluntariado, que es el taller de tejido solidario, donde se tejen mantas que después se donan a escuelas rurales
MM: ¿Cuántos asociados tiene la mutual?
FL: 1.400 activos y cerca de 450 socios adherentes. Más de 1.800 en total.
MM: ¿Nuevos proyectos?
IF: Estamos armando una red con otras mutuales con el objetivo de alcanzar distintos convenios y compartir beneficios. Y también estamos en una suerte de transición de nuestro sistema informático. Cambiamos la metodología de trabajo y ahora lo hacemos por proyectos.
FL: la verdad es que lo que hay disponible en materia de software para administración de mutuales nos queda corto, así que estamos buscando un desarrollo propio y compartirlo luego con otras mutuales. Se trata de tecnología y reestructuración interna. Asimismo, estamos creciendo mucho en responsabilidad social, algo que las mutuales realizamos desde el día cero
MM: ¿Cuántos empleados tiene hoy la mutual?
AC: Son veintidós en total. Quería agregar además que la mutual también tiene locaciones propias que alquila (entre otros al mismo Hospital Italiano) en Almagro, Colegiales y Caballito, y que forman parte de su capital. Esto fue de algún modo el resultado positivo que devino de la mala experiencia de los servicios de consultorios externos como de los terrenos para obras al pozo.
CC: El objetivo era y es invertir en inversiones edilicias o monetarias. En las dos cosas nos ha ido bien y hemos revertido el problema del déficit.
MM: ¿Algún objetivo específico para el resto del año?
IF: Diseñamos las primeras líneas de una red de prevención de salud, pero ya sería para el 2020, este año no llegamos, y es de alcance nacional.
CC: Ahora lo que nos falta es mayor comunicación con los asociados. Hay muchos de ellos que viven la experiencia del mutualismo como si fueran socios de una empresa que brinda servicios, y la verdad es que el mutualismo es mucho más que eso. Es dar y recibir.
