El ejercicio de la medicina actual, se basa fundamentalmente en tratar de diagnosticar que enfermedad afecta a una persona, y luego emplear las terapéuticas establecidas para dicha afección. Esta forma de ver la terapéutica, se vio reforzada por la llamada medicina basada en la evidencia, es decir, realizar estudios y tratamientos que obtuvieron respuesta, en casos similares.
En este sentido, se han establecido Guías de Práctica Clínica, que consisten en recomendaciones basadas en “evidencias” acerca del tratamiento que deben recibir los pacientes que cumplen ciertos criterios de clasificación, para determinada enfermedad. Sin embargo, se viene un enfoque diferente en sus bases, su organización y su implementación.
para La Medicina de Precisión Personalizada “existen enfermos, no enfermedades”
Este nuevo enfoque de la práctica de la medicina, es de carácter revolucionario, e implica un cambio de 180 grados en relación, a la práctica actual, y consisten en obtener la información de los genes o las proteínas propias de cada persona para prevenir, diagnosticar o tratar una enfermedad. Es la llamada Medicina de Precisión Personalizada (MPP), que viene a reforzar un axioma de la medicina, basado esencialmente en que “existen enfermos, no enfermedades”.
Esto significa que, aun siendo la misma enfermedad, cada paciente puede tener un pronóstico y un tratamiento distinto, dependiendo de las características propias de cada uno.
Los pacientes tendrán características especiales que implicarán tratamientos diferentes, aunque se trate de la misma enfermedad
En los últimos años hemos incorporado de apoco y sin darnos cuenta la llamada “medicina de las 4 P” porque es preventiva, predictiva, personalizada y participativa. Estos conceptos obligan a un abordaje clínico diferente de los pacientes, dejando de lado las “enfermedades” para ocuparnos de los “enfermos”. Así, los pacientes tendrán características especiales que implicarán tratamientos diferentes, aunque se trate de la misma enfermedad.
Podemos definir entonces, a la medicina de precisión personalizada, como aquella que tiene en cuenta la información que proporcionan los genes o las proteínas propias de cada persona para prevenir, diagnosticar o tratar una enfermedad.
En mi especialidad, la oncología, la información específica del tumor que afecta a cada individuo, facilita el diagnóstico, el pronóstico evolutivo de la afección, y la planificación del tratamiento, ya que de antemano se puede determinar si un tratamiento resultará eficaz o no.
Los alcances de esta novel modalidad, están destinados a mejorar la salud de las personas. Las determinaciones específicas, que permiten la prevención, el diagnóstico oportuno, y el tratamiento individualizado, son los componentes esenciales de la medicina de precisión.
La medicina de precisión está destinada a mejorar la salud de las personas al permitir la prevención, el diagnóstico oportuno y el tratamiento individualizado
Su implementación, enfrenta varios desafíos éticos y jurídicos. La protección de los datos genéticos de carácter individual es fundamental, a fin de prevenir cualquier forma de discriminación personal basada justamente, en el patrimonio genético de una persona.
Por otro lado, deben evitarse la discriminación y las desigualdades sociales, no sólo por las características biológicas (genéticas) de las personas, sino también y, sobre todo, por las mayores o menores posibilidades de acceso que se tengan a los nuevos avances en virtud de las condiciones económicas, sociales, geográficas, culturales o políticas de las personas y de las instituciones en los que se agrupan.
En estas circunstancias, los riesgos de exclusión social pueden ser elevados, por lo que las acciones para impedirla habrán de tomarse con la mayor precocidad e intensidad posibles. La medicina de precisión personalizada, introducirá, modificaciones profundas en la concepción y en la implementación de la actividad asistencial. Para ello, hay que evaluar y adaptar infraestructuras, servicios, formación académica y profesional, y planificar minuciosamente la distribución y venta de los nuevos fármacos.
Otro desafío es establecer cómo un profesional de la salud, deberá transmitir al paciente, la información obtenida, especialmente cuando se han detectado genes alterados o se encuentra ante resultados inesperados.
Finalmente, la toma de decisiones en el marco de la MPP, exigirá que los profesionales de la salud sean muy cautelosos en el uso de las potentes herramientas informáticas y de inteligencia artificial de las que se viene disponiendo. Uno de los retos a la vista es cómo y hasta dónde aceptar su capacidad predictiva que proporcionan los datos obtenidos.
Siempre deberá tenerse muy en cuenta, que una vez que el paciente fue correctamente informado, pasa a ser quien toma las decisiones terapéuticas, constituyéndose las herramientas de precisión, sobre el diagnóstico, pronóstico y tratamiento, en asistentes y auxiliares del profesional tratante.
