Cuando nos referimos al fortalecimiento de cualquier tipo de entidad, generalmente nos referimos al aspecto económico. Sin embargo, tan o más importante que esta cuestión, es el fortalecimiento de la conducción.
Está comprobado que si un emprendimiento debe soportar problemas económicos o financieros, esta situación puede superarse. Sin embargo, si la dificultad está en la idoneidad de la conducción, difícilmente pueda modificarse.
Ha habido casos de mutuales que debieron afrontar situaciones extremadamente difíciles y luego de una buena gestión de sus directivos, pudieron superar las dificultades hasta lograr un mayor desarrollo que el alcanzado antes de la dificultad.
Los directivos capacitados son los que pueden llevar adelante una acción de fortalecimiento de la mutualidad a través del relacionamiento mutuo, firmando convenios intermutuales y analizando nuevos servicios.
Una herramienta privilegiada con que cuenta la mutualidad es el convenio intermutual, que es propio de este sector, y que permite complementar los servicios que prestan cada una de las entidades, a la vez de lograr un mejor aprovechamiento y minimizar los esfuerzos que cada entidad debiera realizar si brindara todos los servicios, incluido aquellos que brindan otras entidad y que lo puede compartir. Esto lleva a considerar que en una localidad o región, si ya hay por ejemplo un servicio de farmacia, o una guardería, hay que tratar de hacer esfuerzos para concretar iniciativas en otros rubros, para que esa comunidad esté cubierta con todos los servicios mutuales posibles.
Para concretar esto, la dirigencia debe hacer los esfuerzos para compartir espacios, lo ideal es en la Federaciones de mutuales, porque nadie hace algo, con quien no conoce.
Por otra parte y sin desmerecer la labor de la dirigencia, es tiempo de que haga los esfuerzos necesarios para que el mutualismo sea conocido por toda la población, pero a la vez, es imprescindible que en defensa de la buena imagen que deben tener las mutuales por los altos objetivos que tiene nuestro sistema, que se arbitren los medios para impedir que la figura mutual sea mal utilizada, porque el daño que se le causa a todo el sistema y a la población que puede ser perjudicada, y que puede quedar teniendo un mal concepto por haber sido defraudados, amerita que las personas de bien defiendan con todos los recursos que tienen a su alcance, el buen nombre y prestigio que merece tener el mutualismo.
La política que está aplicando el INAES en el otorgamiento de los subsidios orientados a fomentar el desarrollo local, a través de la actividad mancomunada de mutuales y cooperativas, es también una importante oportunidad para el desarrollo de nuestras mutuales, por varias razones.
Las entidades pueden ofrecer ayudas económicas, con el beneficio de recibir partidas para subsidiar los intereses, de esta forma pueden reducir los costos de financiación de los proyectos de agregado de valor que desarrollan las cooperativas con múltiples resultados que beneficien a ambas partes y a las comunidades.
Entre ellos, está la creación de nuevas fuentes de trabajo en los lugares donde se producen las materias primas agropecuarias; que el beneficio económico de la manufactura de las mismas, quede en cada zona productora; que se evite la emigración de los jóvenes y no sufran el desarraigo, y de ese modo también, no se fragmenten las familias; que disminuyan sensiblemente los costos al transportar productos con algún valor agregado en lugar de hacerlo con las materias que tienen mayor volumen y menor valor económico unitario; que como consecuencia directa se creen nuevas industrias de procesamiento de materiales para embalajes y la fabricación de los mismos, entre otros emprendimientos.
Todo lo cual, también puede tener un efecto directo en el ahorro de la población local, que en lugar de canalizar sus inversiones a entidades financieras lucrativas, pueden hacerlo a través de las mutuales. A lo que se agrega la ventaja de conocer a quienes las administran, de manera de tener en claro las condiciones éticas y morales de los responsables del destino que les darán a sus ahorros.
Por otra parte, al llevarse a cabo nuevas obras, se visibilizan en la población las entidades intervinientes y el importante aporte que realizan.
Por otra parte, es sabido que la prensa autodenominada de interés general, se ocupa de las mutuales solamente cuando hay algún problema que las desprestigia, lo cual las perjudica muchísimo por el hábito que tenemos de generalizar, aunque en general, lamentablemente casi toda la información que difunde se refiere a las malas acciones que realizan algunos hombres y poco o casi nada, se ocupa de publicar las acciones que enaltecen al ser humano.
Todo eso hace más necesario aún, que cada mutualista sea un vocero de las buenas prácticas que se realizan en nuestro sector, porque si no se hace difusión, la población en general solamente recibe lo que le hace daño al mutualismo.
La etapa que estamos viviendo en nuestro sector debido a la nueva política que ha implementado el Presidente del INAES, merece ser aprovechada, y la población que aún no se ha asociado a una mutual y que en general tiene tantas necesidades insatisfechas, debe saber de qué se trata.