EL ROL TRANSFORMADOR DE LA SEMAGLUTAMIDA
Como en los próximos días la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica /ANAMAT) autorizará el empleo del fármaco Semaglutamida para el tratamiento de la obesidad, decidimos actualizar la temática. La obesidad es una condición médica compleja caracterizada por la acumulación excesiva de grasa corporal. Esta acumulación no solo afecta la apariencia física, sino que también representa un riesgo significativo para la salud, disminuyendo la calidad de vida y aumentando la mortalidad prematura. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera una epidemia global que afecta a millones de personas en todo el mundo, sin distinción de edad, género o condición social. Una de las principales consecuencias de la obesidad es el desarrollo de enfermedades metabólicas, como la diabetes tipo 2.
El exceso de grasa corporal, especialmente en la región abdominal, produce resistencia a la insulina, lo que impide el uso eficiente de la glucosa por parte del cuerpo. Esto conduce a niveles elevados de azúcar en sangre y, con el tiempo, al deterioro de órganos como los ojos, el sistema cardiovascular y los riñones. Además, la obesidad es un factor de riesgo importante para enfermedades cardiovasculares, incluyendo hipertensión, enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular. El exceso de peso obliga al corazón a trabajar con mayor esfuerzo, lo que puede provocar insuficiencia cardíaca a largo plazo. También se asocia con niveles elevados de colesterol y triglicéridos, lo que contribuye al endurecimiento de las arterias (aterosclerosis). El sistema respiratorio también se ve comprometido, debido a que la grasa acumulada puede dificultar la expansión normal de los pulmones. Esto puede dar lugar a apnea del sueño, una condición potencialmente grave en la que la respiración se interrumpe durante el sueño, reduciendo los niveles de oxígeno en sangre y afectando la calidad del descanso.
La obesidad también tiene consecuencias psicológicas. Muchas personas con esta condición experimentan baja autoestima, ansiedad, depresión y aislamiento social, debido en parte al estigma asociado con el exceso de peso. Estos factores pueden perpetuar un ciclo negativo que dificulta la adopción de hábitos saludables. Frente a esta problemática, han surgido diferentes enfoques terapéuticos para tratar la obesidad. Uno de los más innovadores es el uso de la semaglutamida, un medicamento desarrollado originalmente para el tratamiento de la diabetes tipo 2. La semaglutamida pertenece a la clase de fármacos con acción similar a una hormona que segrega el intestino cuando uno come: agonistas del receptor al glucagón tipo 1 que: a) estimula la secreción de insulina (que disminuye el azúcar en sangre), b) inhibe la secreción de glucagón (que eleva el azúcar en sangre), c) retrasa el vaciamiento gástrico (lo que da más sensación de saciedad), y d) actúa sobre el cerebro para disminuir el apetito.
Uno de los efectos más interesantes de la semaglutamida es su capacidad para reducir el apetito y aumentar la sensación de saciedad. Esto lleva a una disminución significativa de la ingesta calórica, lo que facilita la pérdida de peso en personas con obesidad o sobrepeso. Los estudios clínicos han demostrado que, enfocando la obesidad en forma integral, incluyendo cambios en el estilo de vida (modificación de la alimentación, ejercicios), y con apoyo psicológico, la semaglutamida puede ayudar a perder entre un 10% y 20% del peso corporal, lo cual tiene un impacto positivo en la salud general del paciente.
Además de la pérdida de peso, se ha observado que la semaglutamida mejora los marcadores metabólicos importantes, como la presión arterial, el colesterol LDL y los niveles de glucosa en sangre. Esto la convierte en una opción terapéutica integral, que no solo combate la obesidad, sino también muchas de sus complicaciones asociadas. Respecto a los efectos secundarios, los más comunes son las náuseas, vómitos, diarrea y pérdida del apetito. Sin embargo, estos síntomas suelen disminuir con el tiempo y son manejables en la mayoría de los casos.